Mi momento que me pongo

El otro día bicheando por ahí,  encontré un post sobre este tema en el blog "La emperatriz de Lavapies ".

Para mí las 6:45 de la mañana,  supone un desafío, ¡Intento ser una chica cool !!.

La noche anterior si me siento en un momento tipo ¡ Que guapa soy, que tipo tengo!,  suelo dejar un precioso vestido con unos taconazos.

Cuando me levanto y  me miro al espejo ¡Que horror !!, ¿donde está la chica cool ?,   me pongo mi  super vestido cool porque no tengo más remedio, ya que si busco otra cosa (más acorde con mi nueva personalidad) en el armario,  empiezo a probarme como una desesperada en un día de rebajas, todo me parece que  me queda horrible,  además de llegar  tarde al trabajo.

Ese día  en mi oficina con mi look de chica cool me siento que no pego ni con cola, yo conmigo misma, así que he llegado  a la conclusión de dejar junto a mi precioso vestido escogido para la ocasión, mi uniforme diario, unos vaqueros con una camisa y unas botas. Así que el vestido elegido para ser la chica más cool de la oficina se puede pasar una temporaita de vacaciones en la silla de mi  comedor a la espera de su momento de gloria.

Yo pongo de mi parte por ser una chica cool  ¡pero muero en el intento!!!.